Dónde comer en Cádiz. Ruta gastronómica por la provincia
Detrás del Cádiz de las chirigotas, los carnavales y las playas de surferos, hay una gastronomía donde el producto es la clave. Ortiguillas (una anémona que sirven frita habitualmente y que tiene un sabor a mar profundo y delicioso), atún rojo de Almadraba (que los gaditanos cocinan como nadie en todos sus cortes posibles) y un pescado fresco, que es el rey de la fiesta de cualquier mesa… sobre todo si lo acompañas de un buen vino de Jerez. Comer en Cádiz mola, y más si sabes dónde ir.
Durante mi viaje, visité la ciudad de Cádiz, pueblos de la costa y algunos de los pueblos blancos (los pueblos del interior de la provincia). Aquí os dejo algunos templos del buen comer que podéis apuntar para vuestra visita. ¡Allá van mis recomendaciones para comer en Cádiz!
Cádiz ciudad
La ciudad de Cádiz (como lo llaman ellos Caí Caí) tiene un rollazo que alucinas. Un malecón que da gusto pasearlo, la playa de la Victoria, que está muy apañá para encontrarse en plena ciudad, y unas callecitas estrechas donde corre el fresco que es una maravilla (ni abanico ni ná, oiga). J
Vayámonos a algunas de mis recomendaciones foodie que es para eso para lo que estáis aquí:
Dónde comer en la ciudad de Cádiz
Son muchas las opciones en la ciudad de Cádiz, sobre todo para quien gusta del tapeo relajado.
Si quieres probar algo con lo que seguro aciertas, “acércate” al Faro de Cádiz. Lo entrecomillo porque como te acerques, te espera una buena cola. Mejor reserva con anterioridad y no te quedes con el chasco que me llevé yo por no poder probar su cocina. Ten en cuenta que es uno de los 100 primeros de Europa en Trip Advisor, así que imaginaros las colas para comer aquí. El pescaito frito, la tortilla de camarones o las ortiguillas son platos que le hacen merecedor de la recomendación de tantos usuarios.
En mi investigación foodie descubrí otros lugares de tapeo que son un acierto por sus buenas críticas y que son la Taberna La Sorpresa, Código de Barra, Sonámbulo, La Candela, Salicornia, Ultramar&nos, La Almadraba o La Tapería de Columela.
La Curiosidad de Mauro Barreiro
Si hay algo de lo que me enorgullezco de mi viaje gastronómico a Cádiz es de haber tirado de mi instinto más foodie y haber reservado en La Curiosidad de Mauro Barreiro. ¡Que comida tan fabulosa! Bib Gourmand de la Guía Michelín y un Sol Repsol, no podía equivocarme.
Tienen opción de menú degustación o puedes probar los platos que te gusten de la carta. Mi gastroradar me llevó por el atún rojo de Almadraba (yo veo atún rojo de Almadraba y es como un impulso irrefrenable). Lo probé en dos de sus cortes menos famosos (la tarantela en un guiso de arroz que era muy sabroso) y en galete (la parte del atún más grasa y que parece una costilla de ternera mejorada, y que lo acompañan de verduras de San Lúcar de Barrameda). Otros platos que elegí: la croqueta de pringá o el magret de pato, muy ricos también.
Acabamos la experiencia con un postre: el tocino de cielo de maracuyá con merengue de flores, sopa de miel y cítricos. La verdad es que me resultó muy empalagoso, pero no quedaba tarta de queso y tiré por el postre de nombre más complicado.
La costa de Cádiz
La gastronomía de los pueblos de la costa vanagloria la calidad del pescado…atún rojo, pescado recogido el mismo día, marisco…si te gusta el pescado desde luego que aquí te vas a quedar loco.
En Barbate tenéis un grande como El Campero donde podéis probar ese atún del que se hablan en los mentideros, por su frescura y porque lo saben hacer como nadie (o así se comenta). Salazones, guisos, tradicionales y más originales, lo importante aquí es el atún. Desgraciadamente no pude probar su cocina porque tenía semanas reservadas con antelación. ¡No cometais el mismo error!
Para aprovechar la cocina de la costa, tuve que irme más cerquita de Cádiz, a Puerto de Santa María, donde tengo un par de recomendaciones para hacer la boca agua:
Dónde comer en Puerto de Santa María
Puerto, una de las zonas turísticas de Cádiz por excelencia, se está convirtiendo en uno de esos destinos gastronómicos imperdibles que no pueden faltar en tu ruta.
No puedo dejar de mencionar lugares afamados como los restaurantes de Ángel León, en especial su estrella Michelín, Aponiente, o la Taberna del Chef Del Mar, de picoteo más informal pero con platos adaptados del recetario de Aponiente. Plancton, algas o el pescado que normalmente se descarta en cocina, Ángel lo utiliza todo y Aponiente es una Meca de la gastronomía más marinera. Os recomiendo que reservéis con meses de antelación si queréis probar la cocina de Aponiente y con algunas semanas en la Taberna si vais en temporada alta al Puerto…si no es así, os quedaréis con las ganas de probar su cocina.
En mi visita a Puerto, en pleno mes de agosto, os podéis imaginar que no conseguí sitio en ninguno de ellos, no obstante, he probado lugares de reciente apertura que creo que van a dar mucho que hablar. ¡Allí va!
Ramé
Especial es la palabra que define a Ramé. Un servicio muy agradable, una cocina original, estilo fusión, con platos divertidos y diferentes, y una bodega interesante. Es la perfecta ecuación para hacer de tu cena en Puerto algo para contar.
La carta es sugerente y cuesta decidirse: platos frescos como el Ajoblanco de anacardos, caballa de Conil marinada, aliño asiático y cerezas; más contundentes como el Rigatoni con papada de cerdo, yema de huevo, pajarete, cebolla frita y crema de champiñones trufada o los dumplings de Carrillera.
En el apartado de vinos, déjate aconsejar, podrás probar vinos de la tierra que no te imaginas…probamos uno que nos recordaba al agua de mar y otro más dulce…deliciosos ambos.
Tohqa
Otra reciente apertura con un patio de cuento es Tohqa. El producto, la temporalidad…y su parrilla es la base de la cocina. Con dos opciones de menú degustación, la cocina honesta sin florituras donde el mercado manda, es diferente de lo que uno se espera: sardina con chip de su cabeza (algo difícil de comer pero interesante propuesta), ostra con granizado de albahaca, chopitos en salsa, pescado a la brasa…fueron algunos de los platos del menú de ese día.
Tierra y mar como hilo conductor de Tohqa para aquel que quiera probar buen producto de la bahía gaditana.
Pueblos blancos
Si no los conoces, los pueblos blancos te van a sorprender. Los pueblitos cuquis del interior de Cádiz no solo tienen una orografía diferente, sino muy buenas propuestas gastronómicas para paladares inquietos. Vejer de la Frontera, Medina Sidonia, Jerez de la Frontera… ¡aquí tenéis algunas opciones!
Dónde comer en los pueblos blancos de Cádiz
La Castillería (Vejer de la Frontera)
La Castillería es uno de esos imperdibles donde o reservas o no chance. Puedes probar suerte y llamar a última hora a ver si hay hueco, pero prepárate para que no sea justo la que tenías pensada en tu plan turístico. ¿Qué encontrarás aquí? Productos de la zona cocinados a la brasa y carnes maduradas en sus propias cámaras.
Restaurante las Delicias (Vejer de la Frontera)
Otra opción que puedes encontrar en Vejer es el Restaurante Las Delicias, un teatro del siglo XIX renovado, con una carta meditérranea muy interesante.
Nosotros probamos las croquetas de choco en su tinta, las berenjenas con miel, la ensalada de atún de almadraba y el bao con presa ibérica.
La Carboná (Jerez de la Frontera)
En La Carboná, lógicamente, el vino de Jerez aquí es un must. Una antigua bodega donde se come (y se bebe muy bien) y donde podrás pedir uno de sus menús con maridaje.
La Venta de la Duquesa (Medina Sidonia)
En Medina Sidonia os recomiendo la Venta la Duquesa. Un negocio familiar de cocina tradicional y toques de vanguardia, con cosecha propia, productos de la zona y pescado de la bahía de Cádiz.
Espero que os gusten estas recomendaciones, producto de la investigación y de la práctica empírica (ya que muchos de ellos los he probado yo misma, que es lo importante). Me dejo muchos por el camino pero prometo actualizar esta ruta en mi próxima visita a Cádiz con más sitios para que lo tengáis como guía de referencia. Y tú, en tu visita a Cádiz, ¿qué sitios te han gustado más?